“Pese a la presión de la Unión Europea y la posibilidad de un procedimiento de infracción la reforma se paró y se retiró”, así trasladaba la situación del anteproyecto de Ley de servicios y colegios profesionales la Secretaria General del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, en un desayuno informativo organizado por la Fundación Caminos, think tank del Colegio de Ingenieros, Canales y Puertos celebrado en Toledo el pasado 14 de abril.
Esta información se suma a la apuntada a comienzos de febrero por el Ministro de Economía y Competitividad, Luís de Guindos, quien afirmaba que la ley se retrasaría sine die con el fin de que España se adecuase el paso de los procesos que se están llevando a cabo en Bruselas.
Precisa Cinco Días que las razones esgrimidas para justificar la retirada del anteproyecto se basan en las diferencias entre el Ejecutivo y Bruselas respecto de los colegios profesionales y que a pesar de las “enormes y constantes presiones de la Comisión Europea” para sacar adelante una nueva normativa que reduciría drásticamente las profesiones para las que se prevé la colegiación obligatoria e incorporaría mayores cuotas de liberalización de los servicios profesionales, el Gobierno está convencido del valor de los colegios profesionales.