De todos es sabido el espectacular incremento que están teniendo los fraudes y timos utilizando como cebo el envío de correos electrónicos y mensajes por teléfono móvil (SMS). Pero los cacos, conscientes de que los jubilados no son proclives, en su gran mayoría, al uso de estas tecnologías, parece que han dado un salto cualitativo en sus tretas.
En la foto que acompaña a este artículo se muestra una carta que, al parecer, están recibiendo muchos pensionistas. Carta que llega por correo postal y en un sobre que parece de la Seguridad Social. En ella, con una mala redacción, pero ofreciendo “el caramelo” de una subida en la pensión, los cacos incitan al receptor a remitirles sus datos bancarios y otros muchos datos personales.
Aquellos pobres incautos que “piquen” y remitan la información que les solicitan, con toda seguridad verán sus cuentas bancarias vaciadas, además de exponerse a que sea suplantada su personalidad para cometer otros fraudes.
¿Qué datos no te pedirán nunca?
Ni la Seguridad Social, ni Clases Pasivas, ni este despacho, les van a solicitar todos estos datos, mucho menos les van a solicitar que los comuniquen por correo electrónico y nunca se les preguntaría el importe de su pensión (pues es un dato que debemos conocer). Hay que extremar el cuidado y poner la máxima vigilancia en a quién se le proporcionan los datos bancarios, cómo se proporcionan y para qué. Ante la más mínima duda, no darlos y llamar directamente al organismo o despacho que nos los solicita y hacer las comprobaciones necesarias.
¿Cómo lo hacemos en Habilitación García-Bravo Fernández?
Desde la habilitación García-Bravo Fernández, cuando recibimos una solicitud de cambio de cuenta bancaria para el pago de la pensión, para evitar fraudes, hacemos una doble comprobación: solicitamos el envío del certificado de titularidad de la cuenta bancaria y llamamos por teléfono al cliente para comprobar y ratificar su intención de cambiar de cuenta bancaria. Sin esta doble precaución no podemos acceder al cambio de cuenta por razones de seguridad.
En algún caso puntual, por problemas en el pago de alguna pensión, podemos llamar por teléfono a algún cliente para comprobar el número de la cuenta, pero seremos nosotros los que le indicaremos el número del que disponemos para que nos confirmen que está bien, no le pediremos por teléfono que nos indique un número de cuenta.
Por su seguridad y la de sus ahorros, deben todos de tener mucho cuidado con este tipo de estafas. Ante cualquier duda, llamen a nuestro despacho para que les ayudemos.